martes, 8 de diciembre de 2020

CAE UN ARCO DE LA PLAYA DE LAS CATEDRALES.

El desprendimiento, que se produjo en la noche del domingo al lunes, forma parte del proceso de erosión de toda la cornisa cantábrica.


Son miles los visitantes que recibe cada fin de semana la espectacular playa de Las Catedrales, uno de los atractivos turísticos de la mariña lucense, a pocos kilómetros del límite con Asturias. Sus espectaculares arcos de piedra asemejan a las vetustas construcciones góticas de las que presumen ciudades de toda Europa, pero el proceso de erosión que sufren las formaciones rocosas hace que, de forma habitual, se produzcan derrumbamientos. Eso sí, no tan grandes como el que sufrió el primero de los arcos en la noche del domingo al lunes, que acabó por venirse abajo.

La presidenta de la asociación ecologista Adega, la bióloga Adela Figueroa, cree que estas formaciones, de las que presume el ayuntamiento lucense de Ribadeo, están «condenadas a desaparecer», y que el proceso degenerativo que sufren se ve agravado por el cambio climático. No son nuevos los desprendimientos en este emblemático arenal, en el que una joven de Valladolid perdió la vida en 2018 al caerle una piedra encima. Tras ese suceso, la Xunta restringió los accesos al espacio natural, por los que antes era habitual ver a cientos de paseantes cuando la marea bajaba. En los últimos tiempos, solo se puede visitar en visitas organizadas, con más medidas de precaución, y las señales de peligro están presentes en todos los accesos.

Adela Figueroa señala que el derrumbamiento es un «proceso normal dentro de lo que es la evolución del ataque del mar contra los acantilados, lo que pasa es que en la actualidad este proceso está acelerado por el cambio climático». En su opinión, «se está derritiendo gran parte del agua concentrada en los casquetes polares y eso influye en el nivel del agua, lo que hace que las tormentas y los movimientos de la masa de agua sean mucho más violentos, y serán más violentos cada vez», avisa.

Sobre la posible desaparición de dicho patrimonio natural, respondió a la pregunta con un contundente 'sí', y emplea un principio geológico por el que se deduce que «lo que aconteció hoy ya aconteció en el pasado». Y es que en la comarca de la mariña lucense «hay muchas playas donde se ven restos de las antiguas formaciones que fueron como las de Las Catedrales, que no es más que una etapa en el retroceso progresivo del acantilado, que va siendo sustituido por una rasa costera», explica.

En tanto, el alcalde de Ribadeo, Fernando Suárez, ha asegurado que el desprendimiento es «un fenómeno inherente a la costa cantábrica, derivado de la acción de la naturaleza. El regidor mariñano cree que «las administraciones deben de tomar medidas preventivas y los ciudadanos tener consciencia de ellas y hacer mucho caso de las indicaciones que se encontrarán» en la playa de Las Catedrales cuando vayan a visitarlas, para evitar posibles accidentes.

Por fortuna, en el momento del suceso no había nadie en la playa, por lo que no hubo que lamentar daños personales. La investigación sobre lo que pudo acontecer en este arco, fruto de la erosión secular del viento y el agua, está en marcha ya, mientras que la zona permanece acordonada ante el riesgo de nuevos desprendimientos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

LAS PLAYAS NATURALES DE SEVILLA

Es de sobra conocido que Sevilla no tiene playa y que cuando pensamos en ellas, muchos sevillanos optan por buscarlas en las cercanas costas...